Listo para mi recompensa gris
y el lamento de un tonto como yo
se empieza a escurrir por las goteras
la visión me falla y veo todo claro..
o no veo nada en realidad
con la duda del no saber que ocurre,
de las magnificas delicias de la incertidumbre,
con la compasión por el niño de los rizos definidos
con el querer perseguirla aun aceptando.. no la encontrare..
pero no se que tiene la distancia entre los dos
que el tan solo acercarme a donde estas
la presión funesta en mi pecho, parece languidecer
Así que.. niña mía
viajare hasta donde sea que vayas
aunque serán días de caminar y no comer
pero bien sabes que mi mejor alimento
siempre llegara a ser.. ese tu beso imaginario..
que con la suerte apropiada alcanzare a obtener
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